No
es razonable
pretender que ‘todo se calme en medio
de una tormenta’. Primero tendrá que ‘cesar el viento’ y luego deberán ‘diluirse la nubes’. Tampoco se puede hablar de democracia
y pacificación, si al mismo tiempo estoy “encarcelando a los opositores”.
A principios del mes de febrero del presente año,
expresábamos: “Queremos un Colegio donde siempre el interés particular quede subordinado al interés general. Estamos
persuadidos que la única forma de lograr esta propuesta, es mediante la
ejecución de un proyecto debidamente elaborado y acordado,
que satisfaga el interés general. No propugnamos una institución vacía de contenidos y al servicio de intereses
particulares”. Debemos retornar a
conductas basadas en criterios éticos,
valores sociales y un gran respeto por la figura de la persona y su profesión,
en abierta contraposición a la situación hoy imperante.
Una sede, un diploma, un ambiente
distinguido, una excelente prensa “marketinera”, no son elementos que indiquen
éxito en la gestión. El éxito, en nuestra entidad, lo dispondremos a partir de una conducción prestigiosa y altamente
competente, que cumpla acabadamente con las finalidades impuestas. Además,
estos Dirigentes deben comprender que nuestro intelecto es el mayor
capital profesional que disponemos y debe ser favorecido por una educación
permanente. Pero, esta formación se completa con valores y actitudes éticas.
Profesionales capacitados y con comportamientos éticos, es lo que da prestigio
a un Colegio Profesional.
Por eso expresamos nuestro
interés en un Colegio de puertas abiertas, de administración transparente,
plenamente participativo y otorgando un trato igualitario a todos los colegas.
Siempre hicimos presentes la necesidad del debate de ideas y propuestas, del respeto
a la diversidad de pensamiento y la obtención de un amplio consenso.
No podemos cimentar nuestro éxito en el desprestigio del adversario.
Nuestra mirada se encuentra dirigida al
futuro y se fundamenta en la búsqueda del interés general. Propugnamos un
proyecto destinado a producir un profundo
cambio en la manera de conducir nuestra institución y en la forma
de actuar frente a los reclamos de todos los colegiados, habida cuenta
que nos encontramos en un contexto muy dinámico y diferente al pasado reciente.
De nada sirve que vengamos a exhibir el
logro de nuestras anteriores gestiones porque significaría “anclarnos” en el pasado.
Estamos convencidos que el mayor apoyo debe
dirigirse hacia quienes recién se inician en nuestra
actividad, por ser quienes presentan un mayor estado de incertidumbre y carencia. Debemos prepararlos para que puedan
ajustarse al perfil del profesional que reclama nuestra sociedad y permitir
su inserción plena a la vida institucional, ya que ellos serán quienes mañana nos
sucederán.
También aspiramos a lograr una mayor representatividad
institucional que permita incorporarnos al tejido social de manera efectiva.
No podemos declamar que esto se resuelve manteniendo contacto ambivalente con
algunas instituciones intermedias, cuando todavía no hemos resuelto nuestro
trabajo mancomunado con las instituciones educativas y los demás colegios
profesionales.
Por último, venimos en defensa de nuestros campos de incumbencia, cuestión ésta que no puede ser tratada con liviandad, sino que debe ser el eje de
nuestras preocupaciones y trabajos. Por ejemplo, no se ha logrado el
respeto de nuestra investidura profesional de parte de la mayoría de los
Municipios, quienes desconocen la vigencia de la Ley 9445 y las facultades que
nos son propias.
Esta apretada síntesis expone los fundamentos para lograr la consolidación y fortalecimiento de
nuestro Colegio Profesional. Podrán acordar o no con ellos, pero no queda
margen para poner en duda nuestras
intenciones y la capacidad que
disponemos para lograrlo.
Estimados Colegas, tienen una grave determinación
que tomar el próximo 26 de abril. Están a vuestra consideración los elementos
de juicio para tomar una decisión seria y responsable. Gracias por vuestra
atención y como siempre, nos encontramos a vuestra disposición.
Mauricio Jorge Maer José
Luis Rigazio
Candidato a
Presidente
Candidato a Vice-Presidente
“para
definir los resultados (…) se necesitará absoluta claridad con respecto a
quién debe tomar las decisiones finales y quién estará al mando en los momentos
de crisis.”
(Peter Drucker – “Esencial” – 1999).
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